Las cejas son más que una simple característica facial: son el marco de tu mirada que expresa tus emociones y personalidad. Cuando perdemos densidad en las cejas, no solo se nota un cambio en la expresión, sino en el equilibrio de todas tus facciones.
Existen muchas condiciones que pueden afectar a la densidad de tus cejas, una de ellas es la madarosis supraciliar, una condición que puede impactar tu autoestima, obligarte a depender de maquillaje diario o recurrir a soluciones temporales para disimular.
Hoy te contaré qué es este padecimiento, sus causas, el posible impacto en tus cejas y cómo podemos tratarlo.
Tabla de Contenidos
¿Qué es la madarosis supraciliar?
Madarosis es un término médico que define la pérdida anormal de pelo o vello general, en cualquier parte del cuerpo. Aunque la madarosis puede afectar las pestañas (madarosis ciliar), hoy solo te voy a hablar de la región supraciliar: las cejas.
Esta condición se manifiesta como la disminución en la densidad, o la pérdida total del vello de las cejas, lo que afecta significativamente la simetría y armonía del rostro.
Tipos de madarosis supraciliar
En general, la madarosis se clasifica con base en las causas y lo controlable del padecimiento:
- Madarosis reversible. Es una condición causada por padecimientos controlables, en los que se pueden estimular a los folículos para que vuelva a crecer el pelo.
- Madarosis irreversible. Es una condición causada por enfermedades como la alopecia cicatricial o lesiones que dejaron cicatrices.
Causas de la madarosis de cejas
Con frecuencia, la madarosis supraciliar es la manifestación de un problema subyacente. Por eso es importante entender las causas más comunes:
- Traumatismos y lesiones. Si tuviste un corte, una quemadura o un golpe fuerte en la zona de la ceja, es muy probable que haya quedado una cicatriz. En este caso, el tejido cicatricial destruye por completo el folículo piloso, por lo que la pérdida de pelo es permanente.
- Problemas de la piel. Condiciones dermatológicas como la psoriasis o la dermatitis seborreica (caspa) causan mucha inflamación, picazón y descamación crónica. Si te rascas, podrías dañar los folículos y terminar perdiendo el pelo.
- Alopecia areata. Este tipo de alopecia es de origen autoinmune; es decir, tu sistema de defensa se confunde y ataca a los folículos pilosos. El resultado es la pérdida de pelo en parches, que puede afectar las cejas de forma parcial o total.
- Enfermedades endocrinas. Cuando la pérdida afecta a toda la ceja, la causa suele ser una enfermedad sistémica o endocrina. Por ejemplo, en el hipotiroidismo puede haber una pérdida en el tercio exterior de las cejas, mientras que en el lupus puede haber cicatrices que afecten a la zona,
- Depilación extrema. Si viviste la moda de los 90 y principios de los 2000 y te depilaste las cejas de forma muy fina, es posible que hayas destruido permanentemente los folículos por el trauma constante.
- Tricotilomanía. Se trata del impulso recurrente e irresistible de arrancarse el propio pelo, en este caso, de las cejas. Si este hábito es crónico y muy repetitivo, el daño por tracción puede ser tan fuerte que destruya los folículos de forma irreversible.
- Medicamentos. Algunos fármacos fuertes como la quimioterapia, o medicinas para otras afecciones graves, pueden tener como efecto secundario la pérdida de pelo en el cuerpo y las cejas.
- Tratamientos cosméticos. Aunque parezcan inocuos, tratamientos como la micropigmentación o tatuajes de cejas pueden causar inflamación o un daño cicatricial que impida el crecimiento natural del vello.

Factores de riesgo de madarosis supraciliar
Si bien las causas que te acabo de contar son las que directamente provocan la pérdida, existen factores que te hacen más vulnerable a desarrollar madarosis supraciliar:
- Edad. Aunque la pérdida de pelo en las cejas puede ocurrir a cualquier edad, el proceso natural de envejecimiento (y los cambios hormonales asociados) puede disminuir la densidad después de los 65 años.
- Padecimientos sistémicos. Las personas que ya han sido diagnosticadas con una enfermedad autoinmunitaria (como lupus) o trastornos hormonales tienen mayor riesgo de presentar madarosis en las cejas.
- Estrés. El estrés crónico y un descanso inadecuado pueden afectar la salud general de tu cabello. Además, en personas que tienen tricotilomanía, el estrés puede detonar la necesidad de arrancarse el cabello.
- Nutrición deficiente. Una dieta pobre en nutrientes esenciales como hierro, proteínas o vitaminas B puede debilitar los folículos y aumentar la caída de cabello o cejas.
- Abuso de productos químicos. El uso constante de productos de belleza muy agresivos o irritantes en la zona de las cejas puede dañar el folículo a largo plazo.
Síntomas que puedes estar experimentando
La madarosis no es solo “menos pelo”; viene acompañada de ciertas señales que te ayudan a entender qué está sucediendo en tus cejas:
- Cejas ralas o con huecos. Este es el síntoma más obvio de madarosis supraciliar: la disminución de la densidad en las cejas que hace que aparezcan parches o zonas calvas donde antes había vello.
- Pérdida de la “colita” de la ceja. La parte de la ceja que está más cerca de la sien puede quedarse sin pelo. Como ya te conté, esto es muy común en personas con padecimientos de la tiroides y es una señal de alerta para agendar una cita en Hairfix.
- Comezón, descamación o enrojecimiento. Si además de perder pelo sientes que la zona está irritada, roja, o si hay caspa o descamación, probablemente la causa sea una enfermedad dermatológica como la psoriasis o la dermatitis.
- Piel lisa y brillante. Si la piel del área de las cejas se ve suave, brillante y sin poros, es muy probable que los folículos estén totalmente destruidos y que no haya perspectivas de crecimiento a largo plazo.
Diagnóstico y tratamiento de la madarosis
Aunque cumplas con uno o más de los signos que te acabo de contar, es muy importante que busques ayuda profesional para tener el panorama completo.
En Hairfix, el diagnóstico es un proceso que combina la revisión clínica con las pruebas. el primer paso es observar con un aparato llamado dermatoscopio el patrón de la pérdida: para determinar si hay parches, o si el daño es en toda la ceja. También revisamos el estado de la piel en busca de inflamación, descamación, cicatrices o signos de que los folículos hayan sido destruidos.
Además de la revisión clínica, te haremos un historial detallado sobre tus hábitos de vida, si has estado bajo estrés recientemente, qué medicamentos tomas, y si tienes antecedentes familiares de problemas autoinmunes o, como mencionamos, si ya te diagnosticaron problemas de tiroides o dermatológicos.
De ser necesario, solicitamos análisis de sangre para determinar alteraciones hormonales o deficiencias nutricionales que puedan estar debilitando tu cabello.
El tratamiento dependerá enteramente de si la madarosis es reversible o irreversible (cicatricial). En la mayoría de los casos de madarosis reversible, la caída se soluciona al controlar la enfermedad que la causa; por ejemplo, el hipotiroidismo.
Sin embargo, en la madarosis irreversible, en la que el tejido cicatricial dañó permanentemente a los folículos, el crecimiento natural ya no será posible y únicamente el trasplante de cejas puede ayudarte a recuperar la densidad de tus cejas.

¿En qué casos se considera el trasplante de cejas?
El trasplante de cejas es la opción definitiva cuando la pérdida de vello es permanente, es decir, cuando el folículo piloso ha sido destruido y no hay posibilidad de un nuevo crecimiento natural. Por ejemplo, en los siguientes escenarios:
- Pérdida causada por cicatrices de accidentes o quemaduras.
- Depilación excesiva y crónica de las cejas.
- Pacientes que han recurrido a tratamientos temporales como el microblading y no han quedado satisfechas con el resultado.
Recuerda: si la causa de tu madarosis no es tratable, el trasplante de cejas te ofrece la única vía para conseguir un resultado duradero y de aspecto natural.
¿Se puede prevenir la madarosis supraciliar?
La respuesta es un rotundo sí. Aunque no podemos evitar las enfermedades sistémicas, sí podemos tomar medidas para minimizar el riesgo y mantener la salud de tus cejas:
- Reduce la frecuencia con la que depilas tus cejas, especialmente si usas pinzas o cera.
- Frota tus cejas suavemente al desmaquillar o limpiar tu rostro.
- Usa productos suaves y no irriten la piel de tu rostro.
- Lava tu cara todos los días para evitar la acumulación de grasa o residuos de maquillaje.
- Controla tus padecimientos: si ya tienes una enfermedad autoinmune u hormonal, la mejor prevención es mantener tu condición bajo control.
El último consejo: si notas cambios en la apariencia o densidad de tus cejas, no lo dejes pasar. Buscar ayuda profesional a tiempo es la mejor manera de asegurar un tratamiento reversible antes de que el daño se vuelva permanente.
Acércate a Hairfix y recupera la densidad de tus cejas
En Hairfix entendemos que el trasplante de cejas es un arte. Para obtener resultados satisfactorios necesitamos precisión al implantar el folículo con el ángulo y la dirección correctos, ya que los pelitos de la ceja crecen casi paralelos a la superficie, a diferencia del cabello.
Al implantar folículos sanos, una vez que se integran producen vello de forma permanente, permitiéndote recuperar unas cejas densas, definidas y, lo más importante, de aspecto completamente natural. Nuestra misión es reproducir la curva, el grosor y el patrón de crecimiento que armonice perfectamente con tus facciones.
Si sufres de madarosis supraciliar y tu caso es de pérdida permanente, el trasplante capilar es la puerta a la solución que buscas. No te resignes a maquillar tus cejas a diario, o a tener facciones desiguales o desequilibradas: agenda tu cita hoy mismo




